La Junta de Supervisores aprobó ayer una moción de ayuda conjunta entre las ciudades del condado de Los Ángeles para enfrentar la crisis de indigencia que afecta al área.

La moción permitiría la colocación de miles de indigentes en hogares permanentes con la ayuda de servicios de apoyo, subsidios para alquiler de vivienda y otra asistencia por parte de cada ciudad.  

El condado ofrecerá servicios de apoyo a las ciudades que se han comprometido a proporcionar ayuda de adquisición de viviendas a los desamparados, que incluye Los Angeles, Long Beach, Pasadena, Burbank, Glendale, Pomona y Redondo Beach. Estas ciudades proporcionarán un total combinado de 2,084 vales de alquiler de vivienda

Cada persona indigente que reciba un vale de alquiler tendrá acceso a atención médica, salud mental y tratamientos de abuso de sustancias, manejo de casos y capacitación laboral.

«La falta de vivienda es el problema cívico que caracteriza a nuestro tiempo y enfrentarlo exige el esfuerzo de todos”, dijo el presidente de la Junta de Supervisores, Mark Ridley-Thomas.

«Trabajando de manera cooperativa, eficiente y urgente, el condado y las ciudades no sólo están sacando a la gente a las calles, sino también poniéndolos en el camino hacia la estabilidad y recuperación a largo plazo», añadió Ridley-Thomas.

El último conteo realizado por el condado en enero de 2017, reveló que 57,794 personas carecen de hogar, cifra que se incrementó en un 23 por ciento con respecto al año anterior. El 35 por ciento de esas personas es de origen latino.

El proyecto será financiado con fondos de la Medida H, aprobada con la intención de acabar con la indigencia de 45,000 personas en el condado de Los Ángeles en los próximos cinco años. También busca la prevención de la falta de vivienda para otras 30,000 personas.

Los fondos de la Medida H se obtendrán del aumento al impuesto de venta en un cuarto de centavo, aprobado por los votantes en marzo de este año. Se espera una recaudación de 355 millones de dólares en los próximos 10 años.