Quito (AFP) – Unas más hermosas que otras, de un sinfín de colores, naturales y tinturados, delicados e intensos. Flores producidas en Colombia y Ecuador atrajeron a cientos de compradores de 40 países del mundo, que acudieron a Quito en busca de nuevas variedades.
Brotes de todo tipo como hortensias y girasoles fueron exhibidos. Pero las rosas no dejan de robarse las miradas durante una feria internacional de tres días que concluyó el viernes.
Con hasta 50 pétalos, tallos de un metro de longitud, con o sin fragancia, las rosas no ceden terreno en este exigente mercado, en el que Colombia y Ecuador son de los principales proveedores gracias a producciones que se favorecen por estar ubicados en la línea ecuatorial.
Y se adaptan a las cambiantes tendencias. «Ahora están muy de moda los colores sólidos como el rosado, los vintage, los tierra como cremas, arenas», dijo a la AFP Marcelo Echeverría, gerente comercial en Ecuador de la empresa Dümmen Orange, que presentó nuevas variedades.
«Son los más demandados en todos los mercados para eventos, bodas, graduaciones», agregó.
La variedad Momentum, de un amarillo profundo, sigue siendo la «top pick» de las rosas andinas de la firma holandesa, sin quedarse atrás otras recién producidas como la rosada Sweet Memory y la Violet Hill.
Exclusividad y productividad –
Los productores de flores intensifican esfuerzos por estar a la vanguardia, aunque tienen sus diferencias para captar clientes.
«Ecuador se va mucho a la exclusividad, Colombia se va mucho a la productividad», indicó a la AFP Alejandro Martínez, presidente del gremio ecuatoriano Expoflores, que organizó la exposición.
La feria contó con unos 100 productores y más de 2.000 compradores de diversas partes del mundo, además de aerolíneas y otros proveedores del sector.
Ambos países se alternan cada dos años la sede de la feria de flores, considerada de las más importantes del mundo.
«El mercado europeo en general es muy exigente a variedades», por lo que la diversificación no puede parar, añadió el dirigente del sector floricultor de Ecuador.
Entre enero y julio el país vendió 576,3 millones de dólares, frente al récord anual de 927,3 millones de 2021, según el Banco Central.
Colombia, segundo exportador mundial -detrás de Holanda y por encima de Ecuador-, colocó en 2021 también el récord de 1.727 millones de dólares, de acuerdo con su ministerio de Comercio.
«Cada vez hay más y más interés en diversos tipos de flores», señaló a la AFP el director comercial de Dümmen Orange para Latinoamérica, Bas Pellenaars, anotando que los caprichos de los ‘millennials’ marcan preferencias.
La decoración y colores de las casas también influyen en la moda de las flores.
Y el gusto del consumidor es amplio por las rosas, sea frescas como recién cortadas o preservadas.
También se inclina por otras especies como la vistosa flor de cala -también conocida como cartucho- y los crisantemos.
