Santiago (Chile).- Estados Unidos y Chile firmaron una carta de intención que amplía el Programa de Alerta de Migración Transnacional por Identificación Biométrica (BITMAP). 

Esta iniciativa, liderada por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, busca compartir datos biométricos para identificar y frenar el avance de criminales, terroristas y personas de alto riesgo que intentan cruzar las fronteras de manera ilegal.

«Compartir datos beneficia a todos, excepto a quienes desean hacernos daño», declaró la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem. 

La funcionaria subrayó que el BITMAP representa una herramienta crucial para vetar, rastrear y evitar que los criminales más peligrosos del mundo puedan ingresar a territorio estadounidense. 

Con esta colaboración, Chile se suma a una red de aliados que comparten inteligencia crítica para prevenir amenazas transnacionales, fortalecer el control migratorio y reforzar la seguridad en todo el hemisferio occidental.

El acuerdo firmado representa una continuación del trabajo conjunto que ambas naciones vienen realizando. En la primavera pasada, Estados Unidos capacitó a funcionarios chilenos en el funcionamiento de un programa piloto de BITMAP. 

Ahora, con la firma de esta carta de intención, se establece un puente hacia una cooperación aún más robusta, que podría formalizarse con un memorando de entendimiento en el futuro cercano.

Entre los beneficios concretos de esta alianza se encuentra la capacidad de las autoridades chilenas para detectar posibles amenazas dentro de grupos de migrantes ilegales de terceros países que transitan por su territorio con destino a Estados Unidos. 

Asimismo, el uso del sistema BITMAP en cárceles chilenas permitirá verificar exhaustivamente la identidad de reos y detenidos, lo que podría facilitar la localización de fugitivos y evitar su eventual ingreso a Norteamérica.

Durante la firma del documento, Kristi Noem se reunió por primera vez con altas autoridades chilenas, entre ellas el ministro de Seguridad Pública Luis Cordero Vega, el fiscal general Ángel Valencia y el ministro de Justicia Jaime Gajardo Falcón. En el encuentro se discutieron estrategias para combatir la inmigración ilegal, mejorar el cumplimiento de Chile con los requisitos del Programa de Exención de Visas (Visa Waiver Program) y ampliar la colaboración entre fuerzas del orden para facilitar los viajes legales y frenar el ingreso de delincuentes.

«Hoy, Estados Unidos y Chile profundizamos nuestro compromiso mutuo con la seguridad al discutir cómo podemos colaborar en varias iniciativas clave de intercambio de información», declaró Noem. 

La secretaria también reconoció el esfuerzo del gobierno chileno por mantenerse alineado con los estándares del programa Visa Waiver, una distinción que permite a los ciudadanos de ese país viajar a Estados Unidos sin necesidad de visa por períodos cortos.

El nuevo acuerdo también implica compromisos adicionales por parte de Chile, como aceptar todos los vuelos de deportación organizados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), inscribirse en el sistema de Verificación Electrónica de Nacionalidad (ENV) y participar activamente en la Alianza de Seguridad para la Ejecución de Prófugos (SAFE). 

Estas iniciativas tienen como objetivo acelerar la identificación y repatriación de individuos que representan un riesgo para la seguridad pública.

Desde su ingreso al programa Visa Waiver en 2014, Chile ha sido considerado un socio estratégico por Washington, gracias a su sólida cooperación en temas de seguridad y cumplimiento migratorio. Con el fortalecimiento del BITMAP, la relación bilateral se proyecta hacia una etapa más tecnológica, eficiente y orientada a la prevención de delitos transnacionales.

Esta asociación llega en un momento de creciente preocupación en ambos países por la seguridad fronteriza y la necesidad de establecer mecanismos de detección más eficaces frente a redes delictivas cada vez más sofisticadas. 

La implementación del BITMAP no solo optimiza los procesos de control migratorio, sino que también fortalece la confianza mutua y el compromiso conjunto con el Estado de Derecho y la protección ciudadana.

En palabras de la secretaria Noem, «Estados Unidos y Chile están un paso más cerca de consolidar una alianza integral en seguridad fronteriza, gracias a este programa innovador que apuesta por la tecnología y la cooperación como herramientas clave para garantizar un futuro más seguro».