Santiago (Chile).- Vito, una encantadora vizcacha de los Andes, se ha convertido en la protagonista del fútbol juvenil al ser presentada como la mascota oficial de la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA 2025, que se celebrará en Chile entre el 27 de septiembre y el 19 de octubre.

Con una personalidad vibrante, una estética adorable y una energía contagiosa, Vito promete robarse el corazón de fanáticos de todo el mundo mientras simboliza lo mejor del país anfitrión.

El nombre «Vito» nace del latín «vita», que significa vida, y refleja el espíritu dinámico y acogedor de Chile. Esta pequeña vizcacha, animal autóctono de Sudamérica parecido al conejo o la chinchilla, no solo representa la fauna local, sino también la resiliencia, el optimismo y la calidez de la cultura chilena.

Con su imagen se busca conectar emocionalmente con los aficionados, generar sentido de pertenencia y proyectar al país como un anfitrión alegre, hospitalario y lleno de pasión por el deporte rey.

La presentación oficial de Vito tuvo lugar el 23 de mayo en el Auditorio Osmán Pérez Freire de Valparaíso. La ceremonia fue un evento festivo que reunió a unas 150 personas, incluidos 100 niños y niñas de la región, figuras destacadas del deporte nacional y autoridades.

Entre los presentes destacaron el ministro del Deporte, Jaime Pizarro; la alcaldesa de Valparaíso, Camila Nieto; el presidente de la Federación de Fútbol de Chile, Pablo Milad; y el legendario exfutbolista Elías Figueroa.

El evento fue más que una presentación sencilla. Un mural temático creado en colaboración con un artista grafitero local sirvió de fondo para la ceremonia, reforzando el vínculo entre arte, cultura urbana y fútbol.

Además, se celebró un festival con partidos y presentaciones musicales que capturaron el alma festiva que caracteriza a los grandes eventos deportivos. La figura de Vito no solo fue presentada como un símbolo gráfico, sino como un ente vivaz que recorrerá el país y el mundo llevando consigo la imagen de Chile.

El Mundial Sub-20 es conocido por ser una plataforma de lanzamiento para futuras estrellas del fútbol. Grandes nombres como Lionel Messi, Ronaldinho y Erling Haaland comenzaron a brillar en esta competición, y Chile 2025 no será la excepción.

Con el lema oficial «Las leyendas del futuro», la expectativa es alta para descubrir a los próximos ídolos del balompié mundial. Los partidos se disputarán en cuatro ciudades sede: Santiago (Estadio Nacional), Valparaíso (Estadio Elías Figueroa), Rancagua (Estadio El Teniente) y Talca (Estadio Fiscal), todas preparadas para recibir a equipos y aficionados de los cinco continentes.

Esta será la segunda ocasión en la que Chile organiza este torneo juvenil. La primera fue en 1987, cuando aún se conocía como Campeonato Mundial Juvenil de la FIFA. Desde entonces, el país ha sido anfitrión de otros eventos FIFA, como la Copa Mundial de 1962, la Sub-20 Femenina de 2008 y la Sub-17 Femenina de 2015, demostrando su capacidad para celebrar grandes citas deportivas con éxito.

En esta edición 2025 participarán 24 selecciones, incluyendo potencias como Argentina, Brasil, Francia, España e Italia, junto a equipos emergentes como Nueva Caledonia y Cuba. Chile, como país anfitrión, también competirá en busca de dejar huella en casa. La diversidad de participantes garantiza un torneo competitivo, multicultural y emocionante que celebra el futuro del fútbol global.

Durante la ceremonia de presentación, Mattias Grafström, secretario general de la FIFA, destacó que Vito es una figura que refleja perfectamente el carácter de los chilenos.

«Sociable, hospitalario y apasionado. Vito quiere que todos se sientan bienvenidos y parte de esta gran celebración del fútbol». Por su parte, Pablo Milad subrayó que la vizcacha encarna la fuerza, la alegría y el espíritu combativo del pueblo chileno, características que serán clave para inspirar tanto a jugadores como a hinchas durante el certamen.

Vito no solo será una figura decorativa, sino una verdadera embajadora cultural. Su presencia se extenderá más allá de los estadios: visitará escuelas, liderará campañas sociales y aparecerá en múltiples plataformas para conectar con niños, jóvenes y adultos por igual. 

Su diseño amigable, combinado con valores universales como la inclusión, la perseverancia y la pasión, lo convierten en un símbolo potente en tiempos donde el fútbol busca ser mucho más que un juego.

Así, con Vito como anfitrión, Chile se prepara para abrir sus puertas al mundo en un torneo que promete fútbol de alto nivel, emoción juvenil y un espectáculo inolvidable. Todo está listo para que la vizcacha más carismática del planeta lleve al país a lo más alto del deporte mundial.