Ciudad de Panamá (AFP) – Los hijos del expresidente panameño Ricardo Martinelli (2009-2014), acusados de corrupción por el escándalo Odebrecht, fueron detenidos en Estados Unidos por problemas migratorios, lo que alteró la salud de su padre, a un paso de ir a juicio por presunto espionaje.

«La policía migratoria estadounidense (ICE) arrestó a los ciudadanos panameños Luis Martinelli Linares y Ricardo Martinelli Linares, presentes ilegalmente en el país, en un operativo en Coral Gables, Florida, el 20 de noviembre», dice un comunicado de ICE.

Ambos «entraron legalmente» a Estados Unidos, sin embargo «sus visas fueron revocadas en 2017» y por tanto se mantenían en condición «ilegal», añade ICE.

Luis y Ricardo Martinelli hijo están acusados en su país de cobrar sobornos millonarios de la constructora brasileña Odebrecht para facilitar trámites burocráticos para la construcción de una autopista y el saneamiento de la bahía de Panamá.

Sobre los hijos del expresidente existe una alerta roja de Interpol con fines de extradición, solicitada por la cancillería panameña en mayo de este año.

Pero aunque la cancillería panameña informó en un comunicado que fue notificada por Interpol del arresto, aclaró que las autoridades estadounidensens «no (les) han informado que exista relación entre (su) solicitud de extradición y la detención realizada en el día de ayer».

 – «Me quieren matar aquí» –

La noticia causó impacto en el expresidente Martinelli, quien fue trasladado a un hospital al subírsele la presión durante una audiencia judicial.

«Me quieren matar aquí», gritó Martinelli al llegar caminando al hospital público Santo Tomás, en la capital panameña, custodiado por policías.

«Él está sufriendo la situación de sus hijos, está muy preocupado y sumamente alterado por la noticia que recibió el día de hoy», afirmó Jessica Canto, una de las abogadas de Martinelli.

El exmandatario está actualmente detenido por presuntamente espiar a unos 150 opositores entre 2009 y 2014, por lo que la fiscalía ha pedido que sea condenado a 21 años de cárcel.

El juez de garantías, Jerónimo Mejía, ya ha aceptado numerosas pruebas presentadas por la fiscalía, la defensa y la acusación particular, por lo que Martinelli sería enviado a juicio en los próximos días.

 – «Triunfo de la justicia» –

Según las acusaciones, los hijos de Martinelli habrían recibido en distintas sociedades seis millones de dólares de Odebrecht entre 2009 y 2010 para facilitar trámites. Posteriormente habrían cobrado cerca de 50 millones de dólares por otros servicios a la empresa brasileña.

«De mis hijos han dicho muchas mentiras hoy, mucha desinformación. Ellos tienen una situación migratoria que la van a resolver porque su estatus en Estados Unidos es legal», señaló Marta Linares, madre de los arrestados.

Odebrecht, que acordó pagar a Panamá una multa de 220 millones de dólares y colaborar con la justicia, reconoció haber pagado 59 millones de dólares en sobornos entre 2010 y 2014.

El expresidente también fue detenido en junio de 2017 en Miami, hacia donde huyó en 2015 para evitar la justicia de su país, aunque fue extraditado a mediados de 2018.

Pese a las acusaciones, el expresidente y sus seguidores manifiestan que se trata de una «persecución política» del actual mandatario, Juan Carlos Varela, su antiguo aliado convertido en enemigo político.

«Este es un triunfo más de la justicia, que con el brazo largo, poco a poco está capturando a todos esos que cometieron actos de agravio en perjuicio de los intereses nacionales», afirmó Carlos Herrera, abogado querellante en la causa contra Martinelli.