Cannes (Francia).- El próximo 14 de mayo, el Festival de Cannes abrirá sus puertas para su 77ª edición con una invitada de honor que no necesita presentación: Meryl Streep. 

Este evento, que se celebra anualmente en el icónico Grand Théâtre Lumière, culminará el 25 de mayo con la entrega de premios, presidida por Greta Gerwig. 

Este año, la ceremonia tiene un significado especial, ya que marcará el retorno triunfal de Streep a Cannes, 35 años después de haber sido reconocida como la mejor actriz por su papel en «Evil Angels».

Desde Jeanne Moreau hasta Jodie Foster, grandes figuras del cine han sido honradas en Cannes, y este año, Meryl Streep se unirá a este prestigioso grupo al recibir la Palma de Oro Honorífica. 

«Me siento inmensamente honrada», expresó Streep. «Ganar un premio en Cannes siempre ha representado el mayor logro en el arte del cine».

Meryl Streep ha dejado una huella indeleble en la industria cinematográfica desde sus inicios en el teatro en Nueva York, pasando por su primera gran película «The Deer Hunter» (1978) junto a Robert De Niro. 

Este papel no solo le valió su primera nominación al Oscar, sino que también marcó el inicio de su compromiso por interpretar a mujeres fuertes y complejas. Su carrera está llena de personajes memorables que van desde la desgarradora elección de Sophie en «Sophie’s Choice» hasta la enérgica editora de moda en «The Devil Wears Prada».

Su versatilidad es legendaria. En «La mujer del teniente francés» de Karel Reisz, interpretó a dos personajes, demostrando su habilidad para asumir desafíos dobles en una sola película. Por otro lado, en «Out of Africa», junto a Robert Redford, mostró una épica romántica que sigue siendo un referente en la historia del cine.

Además de su impresionante capacidad actoral, Streep ha sido una voz activa contra la desigualdad de género en Hollywood, siempre buscando roles que retraten la complejidad de las mujeres. 

Películas como «The Hours» y «Mujercitas» son testamento de su dedicación a representar a personajes femeninos en toda su riqueza y contradicciones.

Este año en Cannes, dos generaciones se unen en el escenario: Meryl Streep y Greta Gerwig, ambas figuras icónicas, reflejan la evolución del cine y el papel cambiante de las mujeres dentro de la industria. 

Es un encuentro de talento, historia y pasión por el arte cinematográfico, prometiendo ser un momento destacado del festival.

La ceremonia de apertura y el homenaje a Meryl Streep no solo celebran su regreso a Cannes, sino que también subrayan la influencia duradera de sus películas en nuestro imaginario colectivo. 

«¡Todos tenemos algo en nosotros de Meryl Streep!» exclamaron Iris Knobloch y Thierry Frémaux, destacando cómo su trabajo ha tocado y transformado nuestras vidas a través del cine.

A medida que el Festival de Cannes se prepara para recibir nuevamente a esta leyenda viva, los espectadores y participantes pueden anticipar una celebración del cine que es, en muchos sentidos, también una celebración de la vida y legado de Meryl Streep.