San Sebastián (España).- El Festival Internacional de Cine de San Sebastián vuelve a erigirse como escaparate imprescindible del cine español en su 73ª edición, al incluir un total de 22 producciones nacionales entre largometrajes, cortos y series. 

Del 19 al 27 de septiembre, títulos de autores consolidados y nuevos talentos serán protagonistas en secciones como la Sección Oficial, New Directors, Horizontes Latinos, Zabaltegi-Tabakalera, Perlak, Made in Spain y Velódromo.

La Sección Oficial contará con la presencia de reconocidos cineastas como Jose Mari Goenaga y Aitor Arregi, que competirán por la Concha de Oro con Maspalomas, una historia protagonizada por Jose Ramon Soroiz. 

Ambos directores, parte del colectivo Moriarti, ya dejaron huella con títulos como Loreak, Handia y La trinchera infinita, acumulando numerosos premios en este mismo certamen. Junto a ellos, regresa José Luis Guerin con «Historias del buen valle», una no ficción ambientada en el barrio barcelonés de Vallbona, casi 25 años después de su aclamada «En construcción».

Alberto Rodríguez vuelve con fuerza con «Los tigres», protagonizada por Antonio de la Torre y Bárbara Lennie, además de la miniserie «Anatomía de un instante», basada en el intento de golpe de estado del 23-F. 

Rodríguez, uno de los directores más premiados del cine español reciente, tiene una larga relación con San Sebastián, donde ha presentado títulos como «La isla mínima» y «El hombre de las mil caras».

Agustín Díaz Yanes, otro nombre clave del cine nacional, mostrará fuera de concurso «Un fantasma en la batalla», una historia inspirada en la mayor operación encubierta contra ETA. La película está protagonizada por Susana Abaitua y un sólido elenco que incluye a Ariadna Gil y Raúl Arévalo.

La producción española se expande también en el formato serie. Koldo Almandoz presenta «Zeru ahoak», thriller que continúa el universo iniciado en «Hondar ahoak». Paco Plaza y Pablo Guerrero llevan a la pantalla «La suerte», con Óscar Jaenada y Ricardo Gómez, mientras que Iván Fund muestra «El mensaje», una road movie emocional premiada en Berlín.

Entre los estrenos más esperados está «Flores para Antonio», codirigido por Isaki Lacuesta y Elena Molina, centrado en la figura del músico Antonio Flores. También destaca «Karmele», adaptación de la novela de Kirmen Uribe, dirigida por Asier Altuna y Aro berria, debut de Irati Gorostidi sobre la lucha obrera vasca en los años 70.

Diego Céspedes debuta con «La misteriosa mirada del flamenco», una propuesta arriesgada que mezcla western y realismo mágico en clave queer. Por su parte, José Alayón dirige «La lucha», centrada en una relación padre-hija ligada a la lucha canaria. Marta Medina y Enrique López Lavigne rinden homenaje a Iván Zulueta con el documental «El último arrebato», que revisa la obra del director de Arrebato.

Sergio Oksman, premiado documentalista, presentará «Una película de miedo», mientras que Guillermo Galoe estrenará «Ciudad sin sueño», ambientada en la Cañada Real de Madrid. Lur Olaizola contribuirá con el cortometraje «Bariazioak», una meditación visual sobre el duelo.

En Made in Spain, Fernando Colomo inaugurará la sección con «Las delicias del jardín», una comedia autobiográfica que reúne a Carmen Machi, Antonio Resines y Brays Efe. Lo acompaña el cortometraje «Abril, hoy no es invierno», de Mabel Lozano, centrado en la defensa de los derechos de personas con parálisis cerebral.

El Velódromo acogerá proyecciones para grandes audiencias, como «Rondallas», de Daniel Sánchez Arévalo, sobre la recuperación de tradiciones musicales en un pueblo gallego. También se exhibirá «Hasta que me quede sin voz», una emotiva crónica del músico Leiva y su lucha personal tras una lesión vocal.

El cine español no solo tendrá presencia en número, sino también en diversidad de géneros, estilos y formatos. Desde el drama social hasta el thriller, pasando por el documental y la comedia, las propuestas nacionales reflejan la vitalidad de una industria en constante evolución. 

La apuesta decidida del Festival de San Sebastián por el cine español refuerza su papel como una de las principales plataformas de impulso para creadores y creadoras que encuentran en este certamen un espacio de visibilidad, consolidación y diálogo con el público y la crítica internacional.

La presencia de figuras consagradas convive con las voces emergentes, algunas formadas en iniciativas como Elías Querejeta Zine Eskola o residencias como Ikusmira Berriak. En conjunto, la selección evidencia un mapa creativo diverso y sólido, donde conviven propuestas arriesgadas con relatos de profundo calado emocional y político. 

Una edición que, sin duda, confirmará la riqueza del cine español en la escena global.