Cannes (Francia).- La ópera prima del joven director chileno Diego Céspedes, La misteriosa mirada del flamenco, ha sido galardonada con el prestigioso Grand Prix de la sección Una Cierta Mirada en el Festival de Cannes 2025, cuya clausura se celebró el sábado en la Riviera Francesa.
El filme, que tuvo su estreno mundial en el certamen, se posiciona así como una de las revelaciones cinematográficas del año, destacando la consolidación del cine chileno en la escena internacional.
Este reconocimiento llega en el marco de una edición que ha puesto en valor las nuevas voces del cine mundial, al incluir 20 largometrajes en su selección oficial de Una Cierta Mirada, de los cuales nueve fueron óperas primas.
La sección, conocida por impulsar el cine de autor y los talentos emergentes, fue inaugurada este año por «Promised Sky», de la directora tunecina Erige Sehiri, y contó con un jurado presidido por la realizadora británica Molly Manning Walker.
La acompañaron la cineasta franco-suiza Louise Courvoisier, la directora del Festival Internacional de Cine de Róterdam Vanja Kaludjercic, el realizador italiano Roberto Minervini y el actor argentino Nahuel Pérez Biscayart.
«La misteriosa mirada del flamenco» sitúa su historia en el árido desierto chileno a comienzos de los años 80. En un entorno marcado por la marginación y la desconfianza, Lidia, una niña de once años, vive con su familia queer en un pueblo minero hostil y empolvado. Cuando una misteriosa enfermedad comienza a propagarse —se rumorea que se transmite con una sola mirada entre hombres enamorados—, la comunidad estigmatiza a su familia.
En respuesta, Lidia se embarca en un camino de venganza, enfrentando no solo la violencia y el odio de su entorno, sino también el dilema del amor como amenaza y refugio. La historia entrelaza drama, crítica social y un potente simbolismo que ha resonado en Cannes por su valentía y sensibilidad.
La cinta, producida por Quijote Films (Chile) en colaboración con Les Valseurs (Francia), Weydemann Bros Films (Alemania), Wrong Men (Bélgica) e Irusoin (España), cuenta con un elenco encabezado por Tamara Cortés, Matías Catalán, Paula Dinamarca, Claudia Cabezas y Luis Dubó. La combinación de sensibilidad artística, humor sutil y una fuerza simbólica contundente le ha valido críticas elogiosas, siendo calificada como «la gema secreta de Cannes» por The Hollywood Reporter.
El productor chileno Giancarlo Nasi, figura clave detrás del proyecto, compartió su emoción al recibir el premio.
«Ha sido increíble esta edición de Cannes. Agentes de Estados Unidos, Europa y Asia hablan de la película. Desde el primer día sentimos que estábamos corriendo como favoritos. Es una película muy chilena, pero que ha conectado con mucha gente. Se ríen, lloran… Es una excelente representante de Chile aquí en Cannes y lo será alrededor del mundo».
Nasi, cuya trayectoria en el festival suma ya siete películas, celebra por primera vez este codiciado premio, lo que representa un hito tanto para su carrera como para la producción nacional.
«La película habla de la disidencia, pero también del amor, de la familia y de la amistad», agregó Nasi. «Es un paso importante en nuestra carrera y en la lucha por un cine chileno de calidad, con alcance global».
Por su parte, el director Diego Céspedes, quien ya había sido premiado en Cannes en 2018 con su cortometraje «El verano del león eléctrico», dedicó el premio a las comunidades LGBTQ+ históricamente silenciadas.
«Creemos que este es un reconocimiento no solo para la película, sino para toda la comunidad que resistió antes y nos enseñó cómo hacerlo. En estos tiempos oscuros, debemos revisar su historia y aprender de ellos. Agradecemos a las travestis, a los maricones, a las lesbianas y a todos los que vinieron de abajo a darnos este espacio».
El éxito de «La misteriosa mirada del flamenco» representa más que un triunfo individual. Marca un punto de inflexión para el cine latinoamericano, visibilizando narrativas que históricamente han sido relegadas y poniendo en valor una cinematografía comprometida con la memoria, la identidad y la resistencia.
Su resonancia en Cannes no solo valida el talento de una nueva generación de cineastas chilenos, sino que también reafirma que el cine puede ser una herramienta poderosa para dialogar con el presente desde la belleza, la empatía y el arte.
Con este premio, Chile suma un nuevo capítulo a su historia de logros cinematográficos internacionales. «La misteriosa mirada del flamenco» no solo ha sido reconocida por su calidad artística, sino por su capacidad de generar conversaciones profundas y urgentes.