Washington (DC).- La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, el canciller argentino Gerardo Werthein y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich firmaron este lunes una declaración de intención para avanzar en la reincorporación de Argentina al Programa de Exención de Visas (Visa Waiver Program, VWP).
La firma del acuerdo, celebrada en un acto oficial, marca el inicio de un proceso que podría permitir a los ciudadanos argentinos viajar a Estados Unidos sin necesidad de una visa de turista, tal como ocurre actualmente con 41 países, entre ellos Chile.
Esta medida, de concretarse, representaría un hito diplomático y práctico, ya que agilizaría significativamente los trámites migratorios y fomentaría los viajes y los lazos bilaterales.
“Bajo el liderazgo del presidente Javier Milei, Argentina se está convirtiendo en un aliado aún más fuerte de Estados Unidos, con un compromiso renovado en materia de seguridad fronteriza para ambas naciones”, afirmó la secretaria Noem.
Noem enfatizó que Argentina cuenta hoy con la tasa de sobreestadía de visas más baja de toda América Latina, un indicador clave para evaluar la elegibilidad en el programa.
Además, detalló que los viajes de argentinos a Estados Unidos aumentaron un 25 % en los primeros cuatro meses de 2025 en comparación con el mismo período del año anterior, lo que representa el mayor crecimiento entre los 20 países con más visitantes al territorio estadounidense.
Esta tendencia, según los funcionarios, refleja tanto el interés creciente de los argentinos por visitar Estados Unidos como la solidez de los controles migratorios y de seguridad implementados por Argentina en los últimos años.
La ministra Bullrich señaló que el país «trabaja activamente para cumplir con todos los requisitos del programa» y destacó la importancia de esta colaboración para garantizar “un tránsito internacional seguro y ordenado».
El Visa Waiver Program permite que los ciudadanos de los países participantes viajen a Estados Unidos por turismo o negocios hasta por 90 días sin necesidad de visa, siempre que obtengan una autorización previa a través del sistema electrónico ESTA. Argentina formó parte del programa entre 1996 y 2002, pero fue excluida tras la crisis económica de comienzos del siglo XXI debido a preocupaciones relacionadas con la seguridad y la estabilidad migratoria.
Desde entonces, ningún país latinoamericano, con excepción de Chile, ha sido reincorporado al programa, lo que hace que la posible vuelta de Argentina sea aún más significativa en el contexto regional.
Para lograr la readmisión, el país deberá superar una serie de evaluaciones técnicas y de seguridad, incluyendo el intercambio efectivo de información sobre viajeros, el uso de pasaportes electrónicos, la lucha contra el terrorismo y la implementación de estándares de protección de datos.
La declaración firmada no implica un acceso inmediato al programa, sino una manifestación de compromiso por parte del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos para acompañar a Argentina en el proceso de cumplimiento de los requisitos necesarios.
«Este tipo de liderazgo diplomático, impulsado por el presidente Trump, contribuirá a la seguridad de ambas naciones», agregó Noem.
El canciller Gerardo Werthein celebró el acuerdo como «un reconocimiento a los esfuerzos del gobierno argentino por modernizar sus políticas de seguridad y migración”. También señaló que esta etapa marca “un renacimiento de la relación estratégica entre ambos países, con beneficios concretos para los ciudadanos».
Si el proceso culmina con éxito, Argentina se convertirá en el segundo país de América Latina con acceso al programa de exención.