Cabo Cañaveral (Florida).- En las primeras horas de la madrugada del lunes, marcando un hito histórico en la exploración espacial, el módulo de aterrizaje Peregrine de Astrobotic despegó rumbo a la Luna. 

Este acontecimiento, parte integral de la iniciativa de Servicios Comerciales de Carga Lunar (CLPS) de la NASA, tuvo lugar desde el Complejo de Lanzamiento 41 en la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, Florida. 

Peregrine, impulsado por el revolucionario cohete Vulcan de United Launch Alliance (ULA), emprende un viaje de aproximadamente 46 días hacia la superficie lunar, prometiendo avances significativos en nuestro entendimiento del universo.

La misión de Peregrine se centra en realizar estudios detallados de la exosfera lunar, las propiedades térmicas del regolito lunar, la presencia de hidrógeno en el suelo lunar y la medición de la radiación ambiental. 

Estos estudios, llevados a cabo por los cinco instrumentos científicos a bordo, son fundamentales para la NASA en su búsqueda de comprender mejor los procesos planetarios, la presencia de agua y otros recursos esenciales, y para apoyar la exploración humana sostenible y a largo plazo de nuestro satélite natural.

El administrador de la NASA, Bill Nelson, destacó la importancia de este primer lanzamiento de CLPS, no solo como un avance científico, sino también como un impulso para la economía espacial comercial y un testimonio de la tecnología y la innovación estadounidenses. 

Estas misiones, señaló, son cruciales para entender la evolución de nuestro sistema solar y para moldear el futuro de la exploración humana, especialmente para la próxima generación, conocida como Generación Artemisa.

Entre los instrumentos de vanguardia en Peregrine, se encuentran:

  • Conjunto de retrorreflectores láser: Esenciales para medir distancias con precisión.
  • Sistema de espectrómetro de neutrones: Diseñado para detectar indicios de agua y analizar el regolito lunar.
  • Espectrómetro de transferencia de energía lineal: Un sensor de radiación que recopila información vital sobre la radiación lunar.
  • Sistema de espectrometría de volátiles de infrarrojo cercano: Este sistema mide la hidratación de la superficie lunar y detecta ciertos minerales.
  • Espectrómetro de masas con trampa de iones: Estudia la exosfera lunar, aportando conocimientos sobre los gases presentes.

Se espera que Peregrine llegue a la Luna el viernes 23 de febrero, y durante aproximadamente 10 días recopile datos científicos valiosos. 

Esta misión no solo proporcionará insights sobre nuestro vecino más cercano, sino que también pavimentará el camino para futuras misiones humanas bajo el programa Artemisa, incluyendo el hito de enviar a la primera mujer y a la primera persona de color a la Luna.