Bethesda (Maryland).- Un nuevo estudio financiado por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH) revela que los adultos mayores con dolor lumbar crónico que recibieron tratamiento de acupuntura experimentaron mejoras significativas tanto en su capacidad física como en la intensidad del dolor, en comparación con quienes solo recibieron atención médica habitual, como medicamentos recetados o fisioterapia.
Estos hallazgos ofrecen una alternativa prometedora en medio de la urgente necesidad de opciones seguras, eficaces y no adictivas para el manejo del dolor crónico, especialmente entre los mayores de 65 años.
El ensayo clínico, denominado BackInAction, evaluó a 800 adultos mayores con antecedentes de dolor lumbar durante al menos tres meses. Los participantes fueron divididos en tres grupos: uno recibió hasta 15 sesiones de acupuntura durante tres meses, otro recibió esas sesiones más seis adicionales de mantenimiento a lo largo de los siguientes tres meses, y el último grupo continuó con el tratamiento médico convencional sin acupuntura.
Todos los pacientes mantuvieron su cobertura médica y pudieron seguir accediendo a la atención sanitaria estándar durante el estudio.
Los resultados, basados en evaluaciones personales de los participantes sobre su dolor y limitaciones físicas a lo largo de 12 meses, mostraron que quienes recibieron acupuntura obtuvieron mejoras sostenidas y superiores respecto al grupo sin este tratamiento.
En particular, a los seis y doce meses del estudio, se observaron mayores reducciones en la discapacidad asociada al dolor y en la intensidad del mismo, así como mejoras significativas en la funcionalidad física. Además, los grupos tratados con acupuntura reportaron menos síntomas de ansiedad en comparación con quienes no recibieron esa intervención.
El dolor lumbar crónico es la principal causa de discapacidad a nivel mundial y afecta a más de un tercio de los adultos mayores en Estados Unidos. Las opciones terapéuticas varían desde fármacos analgésicos hasta tratamientos complementarios, como la acupuntura.
No obstante, la mayoría de estos tratamientos logran efectos modestos, y suelen reducir el dolor apenas en un tercio, según explica la autora principal del estudio, la Dra. Lynn L. DeBar, investigadora distinguida de Kaiser Permanente.
«Nuestros resultados clínicos sugieren que la acupuntura funciona tan bien como muchos tratamientos más conocidos. Aunque el efecto es modesto, es positivo y sostenido», afirmó.
La acupuntura, una práctica milenaria originaria de la medicina tradicional de Asia oriental, consiste en la inserción de agujas finas en puntos específicos del cuerpo siguiendo un mapa anatómico. Ha ganado popularidad en Estados Unidos desde la década de 1970 y se ha consolidado como una terapia segura y eficaz para tratar el dolor lumbar crónico en adultos.
Sin embargo, hasta ahora eran escasos los estudios enfocados exclusivamente en personas de 65 años o más, un grupo demográfico particularmente vulnerable a padecimientos musculoesqueléticos persistentes.
Un aspecto destacado del estudio BackInAction es su diseño pragmático y su alcance nacional. Los investigadores se propusieron incluir participantes de diversas regiones del país, de manera que la muestra fuera representativa de la población adulta mayor estadounidense. Además, el tratamiento fue administrado por acupuntores con licencia que ejercen en sus comunidades, es decir, en los entornos donde probablemente recibirían atención los futuros pacientes.
Los autores del estudio también subrayaron la necesidad de mejorar el acceso a la acupuntura para los adultos mayores con dolor crónico. Proponen que permitir a los acupuntores facturar directamente a Medicare —el seguro de salud federal para mayores de 65 años— podría facilitar significativamente el acceso a estos servicios y contribuir a una atención más integral.
La seguridad del tratamiento también fue evaluada a lo largo del estudio. Según la co-investigadora Andrea J. Cook, experta en bioestadística de Kaiser Permanente, se reportaron muy pocos efectos adversos.
Esto reviste especial importancia, ya que muchos adultos mayores enfrentan múltiples condiciones médicas además del dolor lumbar. En este contexto, la acupuntura se presenta como una opción menos invasiva y con un perfil de seguridad más favorable que muchos tratamientos convencionales, incluyendo medicamentos que conllevan riesgos de adicción o efectos secundarios graves.
Este estudio fue financiado por la iniciativa NIH HEAL (Helping to End Addiction Long-term), que busca acelerar soluciones científicas para las crisis de sobredosis y dolor crónico en Estados Unidos. El proyecto recibió apoyo científico del Centro Nacional de Salud Complementaria e Integral (NCCIH) y del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento (NIA).
En un contexto donde las soluciones no farmacológicas y seguras para el dolor se vuelven cada vez más necesarias, especialmente en una población que envejece, la evidencia sobre los beneficios de la acupuntura puede marcar un punto de inflexión en la manera en que se aborda el dolor lumbar crónico en adultos mayores.
Los investigadores esperan que estos resultados impulsen una mayor integración de la acupuntura en los esquemas de atención médica pública y privada.








































































