Montevideo (AFP) – Una coalición de oposición lidera la intención de voto hacia la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Uruguay, luego de alcanzar un acuerdo programático con el que busca desbancar al gobernante Frente Amplio (izquierda), que le pisa los talones.
Luego de los comicios del 27 de octubre pasado que dejaron en competencia al oficialista exalcalde de Montevideo Daniel Martínez y al exsenador Luis Lacalle Pou (Partido Nacional, centroderecha), el primer sondeo de intención de voto para la segunda vuelta da al candidato opositor con ventaja para el balotaje del 24 de noviembre.
Según la encuestadora Equipos, Lacalle Pou, un abogado de 46 años, reúne 47% de la intención de voto, en tanto Martínez, un ingeniero de 62 años, tiene 42%. Un 5% de los encuestados declara que votará en blanco o anulado y 6% se dicen indecisos.
La encuesta muestra una competencia cerrada, toda vez que el margen de error es de +/- 2,8%, pero el crecimiento de Lacalle Pou en relación a la primera votación sextuplica al de su contrincante.
«Los datos muestran que Lacalle Pou crece 18 puntos respecto a su votación de primera vuelta (de 29% a 47%)» y «Martínez crece 3 puntos (de 39% a 42%)», destaca el estudio, el primero que se conoce tras definirse los competidores luego de que ningún aspirante alcanzara la mitad más uno de los votos válidos en octubre.
– Pacto opositor –
Lacalle Pou utilizó las últimas semanas luego de la elección para zurcir una coalición que se presenta como una alternativa al Frente Amplio, que gobierna desde 2005 y va por un cuarto mandato.
El martes, Lacalle Pou anunció un acuerdo con sus nuevos socios para un programa de gobierno conjunto bajo la égida del Partido Nacional.
El documento, llamado «Compromiso por el país» retoma ideas de los partidos Nacional, Colorado (liberal), Cabildo Abierto (derecha), Independiente (socialdemócrata) y de la Gente (derecha), que auparon a Lacalle Pou luego de la primera ronda electoral.
Ordenar las cuentas públicas en un contexto de persistente déficit fiscal de 4,9% del PIB financiado con emisión de deuda, reformar el sector público para generar ahorros por eficiencia que permitan bajar precios de combustibles -entre los más caros del mundo- y tarifas de servicios públicos, o declarar la «emergencia nacional en seguridad pública» luego de un incremento récord de 45% en el número de homicidios en 2018 a 414, son algunas de las líneas de trabajo presentadas por la coalición.
Martínez, que lidera una coalición de partidos, grupos y movimientos de izquierda que funcionan como partido desde su fundación en 1971, comenzó también a mover sus fichas presentando nombres para un eventual gabinete.
El expresidente del Banco Central Mario Bergara sería el continuador de la política económica del actual ministro de Economía, Danilo Astori.
La economía uruguaya atraviesa un período de estancamiento con alto desempleo de 9%, algo que la oposición le endilga al gobierno luego de períodos de vacas gordas con altos precios de las materias primas que Uruguay vende hasta 2014.
El Frente Amplio se llevó un duro sacudón en primera vuelta, cuando perdió varios escaños en el Congreso y su mayoría parlamentaria, por la pérdida de unos 200.000 votantes que se fueron hacia otras formaciones políticas.
Martínez insistió este miércoles en declaraciones reproducidas por la televisión local en que tiene temor sobre el futuro si el Frente Amplio pierde la elección.
«No solo nosotros, creo que más de un millón de uruguayos siente miedo de lo que puede pasar con el futuro del país. Siente miedo y ve en riesgo un montón de realidades que han sido de transformación en el Uruguay» e insistió en que se enfrentan «dos proyectos de país».
«En una semana y dos días tenemos mayoría parlamentaria y cinco partidos apoyando un proceso electoral y un documento», lanzó de su lado Lacalle Pou.
Martínez y Lacalle Pou sostendrán un debate el próximo 13 de noviembre. El presidente se definirá el 27 de noviembre por mayoría simple de votos.
